domingo, 9 de noviembre de 2008

Morcilla con frutas de otoño

Con el otoño, además de la vuelta al cole, llegan un montón de cosas buenas: las naranjas nuevas, unas manzanas estupendas, las granadas, la calabaza y los membrillos.

El membrillo es una fruta que no llama demasiado la atención, por lo general no son fáciles de encontrar y además no puedes comértelos crudos, sin embargo, tienen un olor increíble que llena tu casa, hasta el punto de darte pena cocinarlos.

Mi prima Eva estuvo hace unas semanas en Salamanca, en el pueblo de los abuelis Pedro e Isabel, y trajo un montón de membrillos para todos.


La tía Adela además de pasármelos me imprimió la receta del dulce de membrillo, pero he de confesar que por alguna razón inexplicable no me cuajó como debía… Eso si, está muy rico para desayunar con las tostadas. El año que viene lo intentamos de nuevo.

Todavía me quedaban un par de ellos, y entonces me acordé de una receta que aparece en el libro “Cerdo e hijos” de Stéphane Reynaud, “Morcilla con frutas de otoño”.

Stéphane Reynaud ha escrito un libro precioso con fotografías de Marie-Pierre Morel y dibujos de José Reis matos. 366 páginas dedicadas al cerdo, con mil recetas y datos sobre este rico animalito, desde la matanza hasta el momento de servirlo en el plato, y todo ello ubicado en Saint-Agrève, un encantador pueblecito francés.


Por si os interesa, la editorial es Phaidon, y supongo que no será muy difícil de encontrar por Internet. Yo lo compré en el Musac de León, este verano nos acercamos allí Gari y yo con todos los amiguetes del Erasmus. Cuando era pequeña me gustaba tanto el cerdito y derivados que mi padre decía que conmigo los cerdos tendrían que andar con pistola, así que, cuando vi el libro, de una temática tan atrayente y con un diseño tan coqueto, no me pude resistir.

Pero vamos allá con la receta, exceptuando que hice menos cantidad de la que marca el libro y ciertos problemillas con el flameado (esto es alto cocina, darme tiempo…)lo hice tal cual marca el amigo Stéphane.

QUÉ

  • 3 peras duras peladas (yo además las partí por la mitad y les quité el corazón).
  • Un poco de canela molida.
  • 2 membrillo partidos en cuartos, pelados y descorazonados (pobres membrillos…).
  • Dos cucharadas de mantequilla.
  • 3 manzanas reinetas, también en cuatro trozos, sin piel ni corazón.
  • 1 morcilla.
  • 1 cucharada de azúcar.
  • Un puñado de castañas (el las utiliza de bote, ya cocidas).
  • 2 cucharadas de coñac.
  • Sal y pimienta .

CÓMO

  • Pon a cocer las castañas 1 hora o hasta que estén ya blandas (antes dales un corte con un cuchillo.
  • Pon a pochar el membrillo en una cazuela con la mantequilla derretida durante unos 15 minutos.
  • El fríe la morcilla, yo por aquello de las lorzas, he preferido hacerla durante 10 minutos al horno a unos 200 ºC (hay que pincharla antes de meterla al horno).
  • Espolvorea la pera con la canela y anádela junto con la manzana a la cazuela donde tenemos el membrillo.
  • Cuando la fruta se empieza a ablandar se añade el azúcar y las castañas y se dan unas vueltas.
  • Luego se echa el coñac y se flamea. Yo tomé todas las precauciones del mundo, pero la verdad, aquello no fue nada espectacular…
  • Se salpimenta y se sirve junto con la morcilla.

Se que es una receta un poco atrevida, que mezcla dulce y salado, pero al cerdo le va estupendo la fruta como la manzana, la piña…aunque no os lo creáis, a Gari le gustó, y él no es amigo de experimentos extraños.

Si no os gusta la morcilla, estas frutas también le irían estupendamente a un codillo, o a unas chuletas de cerdo. ¡Qué de posibilidades nos da este rico animalillo!

5 comentarios:

Usoa dijo...

Querida marikeli:
Has hecho precioso como Alejandro. Ya sabes que yo no soy muy amiga de las mezclas dulces y saladas. Lo que sí que quiero es hacerme amiga de ese libro y de Stephene (???)

Por fin, he metido una cosa nueva en el blog. Cuánto trabaja, ahora podemos ser amigas bloggeras.

Eso sí, Txiripa es un blog un poquito más denso que el tuyo, vamos, que hay que combinarlo con recetas más ligeritas que ésta.

maribel dijo...

POR FAAAAAA
HAZ LA RECETA CUANDO VENGAS A CASA

BESOS

AMATXU

Unknown dijo...

tengo que decir que vi "insitu" el plato (que llevo a la ofi al día siguiente) y a pesar de tener cierto aspecto "porno" por la morcilla, olía muy bien y tenía una pinta estupenda.

marilu perez dijo...

Queridas lectoras, la receta está muy rica y se hará en todas las casas que lo soliciten, aunque estoy con uso en que todo el mérito es del amigo stephane...
María que la vió in situ pudo apreciar ciertas connotaciones erotico-festivas que en la foto (al ser parcial) no quedan del todo patentes... La morcilla, era larga, cilíndrica... En fin, como todas las morcillas...

The Intercultural Kitchen dijo...

Ja, ja, ja, qué buena la receta, y qué bueno que seas la enemigo público número uno de los cerdos!
Tomo nota del libro.
PD: ¿también te vendrías hasta Berlín a hacerla?