jueves, 29 de enero de 2009

Minidesayuno

Gracias al blog de Ivana “My Little Things” conocí el grupo Daring Bakers. En este grupo cada mes alguien propone una receta, y todo el mundo debe hacerla siguiendo las instrucciones del anfitrión. Me pareció una idea muy divertida así que me lancé y me apunté! Al de poquito tiempo publicaron la propuesta, y entre que la receta era en inglés y que una no es una gran pastelera…me empezaron a temblar las piernas…

La receta era de Karen del blog Bake My Day! y Zorra de 1x umrühren bitte, y la verdad es que era muy acertada, ya que proponían hacer tejas, con una receta del libro “The Chocolate Book”, escrito por Angélique Schmeinck, con la condición de que el plato fuera “ligero”. Creo que tras la navidad andábamos todos con poca gana de comilonas…

La propuesta era bastante abierta y le di mil vueltas. Al final pensé en hacer una gelatina de naranja, con mousse de yogur y la tejita. Cuando lo vi terminado me di cuenta de que había hecho un desayuno un poco especial, con su zumo de naranja, su lácteo y su galleta…

NOTA: Hice la gelatina el sábado, y al día siguiente la mousse y la teja.

QUÉ

Para la gelatina de naranja
  • 250 ml de zumo de naranja (o mandarina, granada…)
  • 3 hojas de gelatina.
  • Agua fría.
  • Una cucharada de azúcar.


Para la mousse de yogur

  • 2 claras de huevo.
  • Un yogur (yo puse el griego de Danone).
  • Una cucharada de miel.


Para la teja

  • 65 gr de mantequilla ablandada.
  • 65 gr de azúcar glas.
  • Unas gotas de esencia de vainilla.
  • 2 claras grandes de huevo (yo eché tres pequeñas).
  • 65 gr. de harina.


CÓMO

La gelatina de naranja

  • Ponemos la gelatina en agua muy fría durante 15 minutos.
  • Calentamos el zumo, sin que llegue a hervir, y diluimos el azúcar. (A ver si investigo el agar-agar y así no calentamos el zumo, me da pena por lo de las vitaminas…).
  • Mezclamos el zumo caliente con las gelatinas escurridas, cuando se diluyan lo ponemos en flaneras pequeñitas (yo pude hacer 4).
  • Cuando enfríe lo metemos en la nevera hasta el día siguiente.
  • Lo desmoldamos sumergiendo el molde en agua caliente (que no entre agua dentro del molde).


La mousse de yogur

  • Mezclamos bien el yogur con la miel.
  • Montamos las claras a punto de nieve (yo lo hago con las varillas de la batidora).
  • Mezclamos con cuidado el yogur y las claras con la ayuda de una espátula.
  • Con ayuda de una manga pastelera lo colocamos sobre la gelatina.


La teja

  • Batimos suavemente la mantequilla con el azúcar y la esencia de vainilla.
  • Añadimos las claras.
  • Añadimos la harina poco a poco y sin dejar de batir.
  • Cubrimos el bol con un film y lo dejamos 30 minutos en la nevera.

La masa me quedó bastante líquida y pensé que no iba a salir, un poco a la desesperada hice lo siguiente:

  • Metí la masa en la manga pastelera y sobre un papel de hornear le di el tamaño y forma de la teja con el hilillo que salía (tipo ensaimada, yo pensaba que iba a ir todo a la basura…).
  • Lo aplané un poco con el dedo (que chapuza, ahora que lo pienso me río…).
  • Lo metí 8 minutos al horno a 180 ºC.
  • Tiré el resto de masa (esto no lo hagáis por favor).
  • Contra todo pronóstico, saqué del horno unas tejas increíblemente ricas y muy decentes de forma!
  • Las vamos sacando poco a poco del horno, para que no se enfríen, y les damos forma presionándolas sobre algo cilíndrico, en mi caso el rodillo
  • Para acabar ponemos una tejita sobre la gelatina y la mousse.

This month's challenge is brought to us by Karen of Bake My Day and Zorra of 1x umruehren bitte aka Kochtopf. They have chosen Tuiles from The Chocolate Book by Angélique Schmeink and Nougatine and Chocolate Tuiles from Michel Roux.

domingo, 25 de enero de 2009

¡Y un premio!

Cuando empecé a escribir el blog no tenía muy clara la finalidad del mismo: compartir recetas y experiencias, crear una especie de recetario para consultar, formar parte de una red de personas con intereses comunes…Lo que si tenía muy claro era que me apetecía mucho hacerlo, así que me lancé.

Tres meses después puedo decir que a pesar de todo el trabajo que supone escribir este blog, mis expectativas han sido superadas. He descubierto iniciativas brillantes y muy bien organizadas como el Hemc, he descubierto blogs realmente interesantes, pero sobretodo me he encontrado con gente encantadora, capaces de crear y compartir unas recetas excelentes.

Una de estas personas tan especiales ha sido Ivana de My Little Things, nos conocimos a través del hemc 27 y desde entonces me ha inspirado con su blog y animado con sus comentarios. Y ahora de repente ¡me da un premio! El Premio Muchas Gracias al Blog Amigable. A mí que nunca me habían dado un premio, me quedo sin saber que decir…

Creo que cuando te quedas sin palabras, lo mejor es dar las gracias, así que muchas muchas muchas gracias a todas las personas que me visitan en Marikeli y me animan con sus comentarios, y por supuesto a ti Ivana, por acordarte de los principiantes!

miércoles, 21 de enero de 2009

El talo de Aitor

Me encanta el talo, es una especie de tortita de maíz que se suele comer recién hecha acompañada de lomo, panceta, chorizo o morcilla.

Además de que está buenísimo, tienes que esperar a las fiestas de Bilbao o al mercado de San Lorenzo o Santo Tomás para comerlo, así que cada vez que ves una txosna con talo suele estar con una cola tremenda (que merece la pena esperar).



Sin embargo, en esta ocasión el talo no se ha hecho esperar tanto. Trabajo en una empresa de organización de eventos, y la semana pasada tuvimos una entrega de premios, a la que para mi alborozo vino Aitor Aurrekoetxea a servir el catering. Aitor tiene un baserri con cerditos y prepara unos talos riquísimos (con la ayuda de un equipo de personas increíble) y con producto propio, en esta ocasión talo con lomo, panceta y chorizo.



Las fotos las saqué con el móvil y no están muy allá, pero después de la tabarra que le di a Aitor las tengo poner. (A ver si un día de estos consigo que me chive la receta…).

martes, 13 de enero de 2009

Chipirones con arroz salvaje


Nunca había cocinado chipirones, así que cuando vi la propuesta HEMC #29 empecé a buscar recetas como una loca: chipirones encebollados, rellenos, a la Donostiarra (que no los había visto nunca…), a la Luzienne…

Hasta que en medio del agobio tuve un pequeño momento de lucidez y pensé que lo mejor iba a ser empezar con una receta de toda la vida y a poder ser con un poquito de ayuda especializada. O sea que me ayudara ama a hacer chipirones en su tinta. (En mi casa chipirones a secas, ya que es la receta habitual.)

Que te ayude tu madre está muy bien, no te arriesgas con una nueva receta, tu tía hace la compra y como tu madre tiene lavavajillas no hay que fregar al final…

Eso si, me daba un poco de pena no aportar nada a la receta, pero que recordé un arroz salvaje frito de acompañamiento que hizo Arguiñano una vez. Asunto solucionado, ya tengo la receta, Chipirones con arroz salvaje.

Los chipirones son los de toda la vida, hay mil recetas, yo pongo la que se hace en mi casa desde siempre. El arroz es muy curioso, queda super crujiente y sabe muchísimo a cereales (tipo crispies en salado), eso si como son fritos son pesados y no hay que poner demasiada ración.

QUÉ

Para el arroz salvaje:
  • Dos puñados de arroz salvaje.
  • Aceite de girasol. (No lo suelo usar pero en este caso creo que queda más suave).
  • Sal.


Para los chipirones:

  • 1 kg. de chipirones limpios. (Ver el blog de Pikerita, es muy clara explicando como hacerlo).
  • Las tintas de los chipirones.
  • 2 cebollas picadas.
  • 3 tomates pequeños cortados en cuartos. (O dos grandes).
  • Una cucharada de harina.
  • Aceite de oliva.
  • Sal.


CÓMO

El arroz salvaje:

  • Ponemos una sartén con mucho aceite hasta que esté muy caliente.
  • Comprobamos que está suficientemente caliente el aceite echando un par de granos de arroz. Deben subir rápidamente a la superficie después de chisporrotear un poco. (Como le pasaría a una palomita de maíz).
  • Echamos un puñado de arroz a la sartén. En unos segundos deben chisporrotear y subir a la superficie (no salta demasiado, suelo dejarle las fritangas a Gari porque me da miedo que salte el aceite, y en este caso lo hice yo sola).
  • Sacamos el arroz de la sartén. (Ver el truco más abajo).
  • Salamos.

Truco: Arguiñano en la tele tenía dos sartenes. Freía el arroz en la primera sartén, cuando estaba hecho lo colaba dejando caer el aceite a la segunda sartén y dejando el arroz en un plato. Y así sucesivamente. Yo lo hice como él y es bastante cómodo.

Para los chipirones:

  • Pochamos la cebolla con el aceite.
  • Añadimos los tres tomates y dejamos hacer unos minutos.
  • Salamos los chipirones y los metemos en la cazuela.
  • Añadimos un par de vasos de agua.
  • Dejamos hervir hasta que los chipirones estén blandos. (Comprobarlo pinchando con un tenedor).
  • Sacamos los chipirones y los dejamos en otra cazuela. Los cortamos en cuadraditos si vemos que son muy grandes.
  • Rompemos las tintas y las echamos sobre la mezcla de tomate y cebolla.
  • Añadimos una cucharada de harina y sal a la mezcla.
  • Dejamos hacer poco a poco durante unos 10 minutos.
  • Pasamos la mezcla por el chino y la echamos sobre los chipirones.
  • Dejamos que se haga todo junto otros 5 minutos más o menos.

Lo servimos con el arroz, y ¡listo!

martes, 6 de enero de 2009

Pisto de berenjenas


El domingo pasado vino Zalo a comer a casa. Zaloa es una amiga a la que últimamente no veo tanto como quisiera, porque trabaja en Madrid (ayudante de vestuario de la próxima serie de la primera Águila Roja, no os la perdáis). Y tras el momento de publicidad os pongo un video-parodia sobre ella que le hicieron sus compis del circo del sol para que la conozcáis mejor: tronchante.

Como a la amiga Zaloa le gustan mucho las verduritas, me inspiré en una receta de Jaime Oliver que conocí a través del blog “Mis recetas de cocina”.

Cambié alguna cosilla, no utilicé alcaparras más que nada porque no tenía en ese momento, y decidí poner las berenjenas a la plancha sin aceite para hacer la receta un poco menos pesada.

Es una receta ligerita, lo cual se agradece en estos momentos, con un toque de cocina italiana. A Zaloa y a mí nos encantan las berenjenas a la plancha así que disfrutamos bastante del primer plato. (Los restantes fueron un poco más accidentados, así que hasta que no investigue un poco más no voy a poder compartirlos…)

QUÉ

Para las berenjenas:

  • 2 berenjenas cortadas en rodajas de 1cm de grosor.
  • Aceite de oliva.
  • Sal.
  • Tomillo.

Para el tomate:

  • 2 cebollas cortadas en cachos un poquito grandes (esto a gusto del consumidor).
  • Un bote de tomate triturado.
  • 2 ajos fileteados.
  • 12 aceitunas verdes picadas.
  • 12 aceitunas negras picadas.
  • Aceite de oliva.
  • Sal.
  • Orégano.
  • Albahaca.

CÓMO

Para las berenjenas:

  • Hacer la berenjena a la plancha en tandas.
  • Cuando esté hecha la ponemos en un bol con aceite de oliva, sal y tomillo y lo dejamos macerar una hora más o menos.

Para el tomate:

  • Hacer un refrito con el aceite de oliva y el ajo.
  • Cuando empiece a dorarse el ajo añadimos la cebolla y esperamos a que quede transparente, entonces le añadimos las aceitunas y le damos unas vueltas.
  • Añadimos el tomate triturado, la sal y las especias y dejamos hacer.
  • Probamos el tomate, y si está demasiado ácido (a veces pasa), le echamos un pellizco de azúcar (la primera vez que le eché azúcar al tomate a Gari casi le da un patatús, pensaba que me había vuelto loca del todo…).

Podemos servir por separado, como en la fotografía o mezclar antes de servir. Como sobró, al día siguiente llevé un poco a la ofi mezclado en un tupper y estaba casi más rico que el día anterior. (Así es la vida Zaloa…).