lunes, 29 de diciembre de 2008

Capuccino con florentinas de chocolate y naranja

Si hay un momento a lo largo del año donde se nos juntan todos los compromisos, este momento son las navidades. Comidas de empresas, cenas de amigos, visitas familiares…Pensando en estas últimas propongo una merienda muy rica pero no demasiado pesada, además de muy sencilla de hacer y bastante resultona: capuccino con florentinas de chocolate amargo y naranja.

Para el capuccino utilicé un aparato que nos trajo Usoa de su Erasmus en Bologna, pongo fotografía por si no lo conoceis, y la receta de las florentinas la he sacado del blog de David Lebovitz, son muy muy fáciles de hacer y quedan riquísimas.
aparatejo para hacer ricos capuccinos
QUÉ

Para el capuccino:
  • Café recién hecho.
  • Leche entera.
  • Cacao amargo en polvo. (He utilizado uno de Valrhona, buenísimo).
  • Azúcar al gusto.
  • Una plantilla, yo la hecho dibujando una flor con el freehand. La imprimí, recorté y listo.

Para las florentinas:

  • 1 clara de huevo (grande, o si no dos pequeñas).
  • 50 gr. de azúcar glass. (Yo utilicé azucar normal y lo pasé por la batidora para hacerlo más fino, en un futuro no muy lejano quiero hacerlas sin azúcar porque creo que estarán igual de buenas o más y sería una alternativa a las galletas muy sana).
  • 130 gr. de almendra cruda fileteada.
  • Una pizca de sal en escamas (yo usé maldón).
  • La ralladura de media naranja.
  • 75 gr. de chocolate negro.
  • Un poco de aceite de oliva.
  • Papel especial para hornear.

CÓMO

Capuccino:

  • Ponemos un dedo de leche muy muy caliente en el aparato que hemos visto antes.
  • Ponemos la tapa y subimos y bajamos el émbolo rápidamente para crear espuma.
  • Servimos el café en las tazas y seguidamente la leche espumosa.
  • Ponemos un par de cucharadas de cacao en polvo en un colador.
  • Sujetamos la plantilla encima del capuccino con cuidado para que no llegue a tocar la espuma de la leche, y con la otra mano movemos el colador para que vaya espolvoreando el cacao sobre la plantilla. (Esto es más fácil de hacer si nos ayudan).
  • Servimos las tazas de capuccino para que cada uno lo endulce a su gusto.

Florentinas:

  • Precalentamos el horno a 150 ºC.
  • Ponemos el papel de hornear sobre la bandeja y pintamos con el aceite (si lo podéis repartir con un spray para aceite, mejor).
  • Mezclamos en un bol todos los ingredientes menos el chocolate.
  • Vamos cogiendo pequeñas porciones de la mezcla y las colocamos sobre el papel de hornear. Lo interesante sería que quedaran lo más planas posibles para que se hagan bien. Este paso es un poco engorroso porque la mezcla es pegajosa, no es difícil, pero si un poco lento.
  • Horneamos durante 15 minutos. Para saber si están bien hechas debemos fijarnos en que tengan un color dorado tanto por arriba como por abajo.
  • Una vez que las florentinas están frías fundimos el chocolate y lo vamos extendiendo por la parte de abajo con ayuda de una cuchara o un pincel.
  • Dejamos secar (si es que podemos...) ¡y listo!

lunes, 22 de diciembre de 2008

Auténtico pastel de charcutero

La anfitriona del hemc 28 es Pikerita, de la cocina de Pikerita y como tema ha propuesta la matanza.

Me encanta el cerdo, mis abuelos son de Salamanca y desde pequeña he podido disfrutar de los riquísimos embutidos de allí. Los domingos solía ir a su casa a comer y como aperitivo mi abuelo Pedro siempre freía jeta de cerdo y sacaba aceitunas negras con cebolleta para picar. Es una imagen que tengo grabada y que recuerdo con mucho cariño.

Sin embargo, no he tenido la suerte de participar en la matanza, digo suerte aunque no creo que fuera capaz de verlo…por lo que no tengo recetas propias sobre como hacer embutidos. Pensaba que no iba a poder participar, pero luego me acordé del libro de Stéphane Reynaud y pensé que podría hacer alguna receta, si bien no de matanza estrictamente, relacionada con el tema. Me decidí por el pastel de charcutero, ya que me recordaba mucho al hornazo, una especie de pan relleno de chorizo, salchichón y jamón típico del pueblo de mis abuelos, Linares de Riofrío.

He respetado la receta exceptuando que el autor utiliza vino blanco en lugar de coñac y chalotas en lugar de cebolla. El recomienda hornear tres cuartos de hora, pero en ese tiempo mi pastel no estaba hecho.

QUÉ
  • Un poco de mantequilla.
  • 300 gr. de harina.
  • Aceite de oliva.
  • Media cebolla picada.
  • 1 cucharadita y media de levadura.
  • 4 huevos batidos.
  • 100 ml. de coñac.
  • 200 ml. de leche.
  • 100 gr. de bacon troceado.
  • 100 gr. de jamón curado troceado.
  • 100 gr. de chorizo troceado.
  • 100 gr. de jamón cocido troceado.

CÓMO

  • Precalentar el horno a 160 ºC.
  • Untar un molde tipo “plum-cake” con mantequilla y enharinarlo.
  • Pochar la cebolla en una sartén con dos cucharadas de aceite.
  • Mezclar en un bol la harina con la levadura, los huevos, el coñac, la leche y dos cucharadas de aceite hasta hacer una masa homogénea.
  • Añadir el bacon, los dos tipos de jamón y el chorizo y mezclar.
  • Verter sobre el molde y hornear durante una hora y cuarto. Un buen truco para saber si está hecho es pinchar con un cuchillo, la hoja debe salir limpia. A última hora subí la temperatura y gratiné el pastel para que tomara un tono más dorado.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Pimentón húngaro

El martes pasado me quitaron una muela del juicio y sigo tomando antibióticos, por lo que no he cocinado mucho, por no decir nada. Todavía no puedo comer sólidos, así que los post de cocina van a tener que esperar tiempos mejores.

Sin embargo, quería enseñaros este pimentón que me trajo “la mamma” este verano cuando estuvo en la expo de Zaragoza.

Además de pasar mucho calor y venir con los pies destrozados, le dio tiempo para pasar por el stand de Bélgica y Hungría, lo que se traduce en regalitos de chocolate y pimentón.

La verdad es que no sabía que Hungría era un país productor de pimentón y sobretodo no sabía que lo ponían en unas bolsitas tan preciosas.

Todavía no lo he utilizado, pero espero poner unas patatas asadas con aceite de oliva, sal y pimentón en breve, si no es un pulpo ¡claro!

Espero que sea un buen pimentón, aunque como adorno ya tiene un huequito ganado en mi cocina.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Berenjena rellena

Como muchísimas otras personas, este mes he tenido mi momento gripe. No me duró demasiado tiempo, pero si lo suficiente para que mi madre apareciera con un cargamento de comida para que a su niña no le faltara de nada. Entre galletas, naranjas, jamón york y demás viandas aparecieron dos hermosas berenjenas. Así que, cuando se me pasó un poquito la fiebre, me puse manos a la obra para hacerles el honor. No las he hecho a partir de una receta en particular, simplemente cogí los ingredientes que encontré en la nevera. Tuve la suerte de dar con una bandeja de setas sin terminar, y además utilicé una bola de mozarella que había comprado para una ensalada. Goodbye ensalada, Hello Berenjena.

QUÉ
  • 2 berenjenas.
  • Media cebolla.
  • 150 gr. de setas.
  • 1 bola de mozarella (125 gr.).
  • 1 chorrito de aceite de oliva.
  • Parmesano rallado.
  • Sal y pimienta.

CÓMO

  • Asar las berenjenas en el horno. 20 minutos por cada lado, a unos 220 ºC. No deben quedar demasiado hechas, si están muy blandas es más difícil rellenarlas.
  • Picar la cebolla. A mi me gusta hacerlo en cachos grandes, para poder ver los cachos de cebolla cuando como las berenjenas.
  • Pochar la cebolla con el aceite de oliva.
  • Cuando la cebolla está pochada añadimos las setas y esperamos a que queden tiernas.
  • Partimos la mozarella en dados.
  • Ayudándonos de un tenedor sacamos la carne a las berenjenas, intentamos dejar algo de carne pegada a la piel para que sea más fácil rellenarlas.
  • Mezclamos todos los ingredientes, salpimentamos y rellenamos las berenjenas. Espolvoreamos con el parmesano y gratinamos en el horno hasta que el queso quede dorado.

viernes, 5 de diciembre de 2008

Fin de semana en Segovia


Gari y yo llevábamos tiempo con ganas de visitar Segovia, así que el fin de semana pasado nos cogimos el lunes libre y nos animamos a ir para allá. A pesar de no ser demasiado grande, Segovia tiene muchas cosas para ver, el acueducto, el alcázar, la catedral… además de un casco antiguo precioso cuajado de restaurantes…

Como teníamos varios días visitamos también Pedraza, Riaza y Sepúlveda, tres pueblitos muy bonitos bastante animados por los turistas que se acercan los fines de semana.


Comentaros, que disfruté muchísimo las visitas a los Palacios de Riofrío y La Granja, ambos están muy cerquita de Segovia, en coche claro, y cada uno tiene su encanto. El Palacio de Riofrío no es tan espectacular y su decoración es más austera, tiene un coto alrededor enorme lleno de gamos y ciervos. Aluciné cuando los ví desde el coche, ¡nunca había estado tan cerca de uno! La granja es más tipo “Versalles” con sus jardines…El día que lo visitamos además había nevado un poco y estaba increíble.

Para dormir, La Casa Mudejar. Es un establecimiento muy céntrico, no muy grande pero recién inaugurado. El hotel está en un edificio antiquísimo que todavía presenta artesonados mudéjares del siglo XV, restos romanos… Además en el bar tenían unas tostas de berenjena, solomillo, cordero… ¡increíbles!

Tuvimos oportunidad de disfrutar de la cocina típica, como la sopa castellana (que resucita a un muerto y entraba estupendamente con el frío que hacía), la caldereta de choto, codornices guisadas y por supuesto cochinillo. El cochinillo lo comimos en un restaurante que nos habían recomendado, Casa Bernardino, y la verdad es que salimos encantados, bastante empachados y un poco piripis…

En definitiva, pasamos un fin de semana muy tranquilo, disfrutando de las excursiones que pudimos hacer, incluso del frío y de la nieve, desconectando un poquito de la ciudad y comiendo rico en un entorno natural precioso.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Pomelo vs. Granada

A su izquierda el pomelo, a su derecha la granada
A partir del post Vitaminas a go-go a mi amiga Usoa le surgieron ciertas dudas entre el pomelo y la granada, y pidió una aclaración tipo Barrio Sésamo. No se me ocurre una aclaración más efectiva que sacar fotografías de ambas frutas, así que allá van, con un fondo de lujo: un grabado de la propia Usoa. No dejéis de visitar su página de Flickr, allí podréis ver parte de su obra, todo un lujo. (Por cierto, la granada está un poco txutxurria, generalmente presentan un color rojo mucho más intenso…).

domingo, 30 de noviembre de 2008

Foodie Blogroll

Los detallistas os habréis fijado en un nuevo elemento en mi página, el Foodie Blogroll. Es una página en la que se dan cita hasta 2718 blogs de cocina de todo el mundo. Un punto de encuentro para conocer otros blogs y autores, ver mil recetas nuevas e investigar un poquillo que se cuece por el mundo.

Me hace mucha ilusión formar parte de este Blogroll y espero poder compartir con vosotros un montón de novedades.

sábado, 22 de noviembre de 2008

Canelones de espinacas y queso


A pesar de que le pongo mucha ilusión, no puedo decir que sea una blogger muy profesional. Mi blog por el momento está en pañales y no me he relacionado demasiado por este mundillo. Todavía estoy en una etapa de investigación, descubriendo blogs, herramientas, posibilidades…

En una de estas incursiones me topé con el blog “HEMC-Hecho en mi cocina”. En este blog cada mes una persona diferente hace de anfitrión y propone un tema, todo aquel que quiera puede enviar una receta sobre el tema propuesto. Finalmente se recopilan todas las propuestas. Una idea excelente ¿No os parece?

Este mes, es el HEMC #27, y el tema los canelones. Tras darle algunas vueltas e investigar un poco sobre recetas de pasta rellena, decidí intentar unos canelones de espinacas y queso. Es un compendio de diferentes recetas, lleva piñones tostados y pasas, salsa bechamel, y es una receta vegetariana. Espero que os guste.

Kattalin mirando los canelones antes de hornear

QUÉ
Para el relleno:
  • 50 gr de piñones.
  • 50 gr de pasas.
  • 300 gr de espinacas.
  • 350 gr de queso fresco.
  • 125 gr de mozarella (una bolita).
  • Sal y pimienta.
Para la salsa bechamel:
  • 30 gr de mantequilla.
  • 3 cucharadas de harina.
  • Leche entera, lo que admita la salsa (menos de un litro).
  • Nuez moscada.
  • Sal.
  • Queso parmesano rallado.
La pasta:
  • Un paquete de canelones (125 gr)
CÓMO
La pasta:
  • Cocer la pasta en agua salada según indique el envase. Un truco importante es echar las placas de canelones de una en una para que no se peguen. Luego las extendemos sobre un paño limpio y ya las tendríamos preparadas para rellenar.
El relleno:
  • Dejar escurriendo el queso fresco, por ejemplo en un colador grande.
  • Poner una sartén al fuego, tostar los piñones hasta que adquieran un tono dorado.
  • Cocer las espinacas con agua salada. Le pongo muy poquito agua porque las espinacas menguan mucho, y las saco enseguida (como cuatro minutos de cocción).
  • Mezclar en un bol los piñones tostados, las pasas, la mozarella cortada en dados, el queso fresco y las espinacas muy bien escurridas. Es muy importante que todos los ingredientes estén muy bien escurridos porque sino soltarán el agua en el horno.
  • Salpimentar la mezcla.

La salsa:

Hay muchas maneras de realizar esta salsa tan famosa, yo personalmente la hago en una sartén antiadherente amplia.

  • Derretir la mantequilla a fuego suave.
  • Añadir la harina y mezclar.
  • Vamos añadiendo la leche poco a poco y mezclamos haciendo círculos para que no se formen grumos. Si finalmente se forman los grumos, tampoco pasa nada, yo le meto un poco de batidora en la misma sartén y listo.
  • Cuando adquiera la consistencia que queremos, salamos y le rallamos un poco de nuez moscada.
  • Ya solo nos quedaría rellenar la pasta, colocar en una bandeja y bañar con la bechamel. Espolvoreamos con el parmesano y a gratinar en el horno. (Máxima temperatura y hasta que la superficie quede dorada).

domingo, 16 de noviembre de 2008

Vitaminas a gogo




Si hay algo que disfruto en especial durante la semana, es el desayuno del sábado. Levantarse tranquilamente… saber que todavía te queda todo el fin de semana por delante… ¡Que maravilla!

Empiezo tomándome un buen zumo. Luego pasamos a la parte sólida, que suele ser unas tostadas con aceite y tomate, y si hay suerte un poco de paletilla, ¡Esto es empezar bien el día! Y para acabar, un buen te calentito.

Me gusta mucho la fruta en general, pero utilizar la licuadora me da bastante pereza, por lo que suelo optar por utilizar el exprimidor para hacer zumos. El exprimidor no solo sirve para hacer zumo de naranja, que suele ser la opción de entre semana, los sábados mezclo naranjas con pomelo rosa (que bonitos que son…), mandarinas, y en otoño e invierno granadas.

La granada es una fruta muy rica, pero que da bastante pereza comer, en estos momentos las naranjas vienen un poco ácidas, por lo que mezclar un par de ellas con una granada es una idea estupenda. No cuesta nada, se exprime como si fuera una naranja, es dulce, muy sana y el zumito te queda de un color precioso.

Koftas


Esta receta de Koftas, unas sabrosonas hamburguesas especiadas, me la ha pasado Juan.

Juan es un amigo de Gari que se sabe un montón de recetas ricas, muchas de ellas gracias a su ama, que debe cocinar como los ángeles… Además de las koftas me ha pasado una receta de falso txangurro, que de falso tiene el precio, ¡porque de sabor parece auténtico! A ver si me acuerdo y lo pongo en el blog dentro de poquito, es una receta estupenda para navidad y ya no nos queda tanto para que llegue…

Pero volvamos a las koftas, por recomendación del chef (o sea Juan) las serví en una pita con lechuga, tomate y cebolleta. Juan hablaba de una salsa de kebab “Gyma” del makro, me daba bastante pereza irme hasta allí, así que utilicé una salsa harissa que tenía muchas ganas de probar. El resultado fue muy bueno, pero tener cuidado porque pica lo suyo. En cuanto a las pitas, encontré unas pitas integrales en el eroski, son baratas, fáciles de utilizar e integrales, ¿Qué más puedes pedirle a una pita?

La receta es muy sencilla y rápida, pero hay que tener en cuenta el tiempo de maceración de la carne, 1 hora. Con las cantidades que utilicé comimos Gari y yo como cuatro pitas cada uno, si os parece demasiado dividirlo entre dos y ¡solucionado!

QUÉ

  • 1kg de carne picada (ya sabéis, como las amatxus, que os lo piquen dos veces).
  • 1 cebolla picada muy fina (yo la piqué con el accesorio picador de la batidora).
  • 1 huevo.
  • 1 cucharadita de canela molida.
  • 2 cucharaditas de comino.
  • 1 cucharada de curry.
  • El zumo de medio limón.
  • Sal y pimienta.
  • 1 tomate en rodajas finas.
  • Unas hojas de lechuga.
  • 1 cebolleta.
  • Salsa Harissa.

CÓMO

  • Salpimentar la carne y mezclar con el huevo batido.
  • Añadir el resto de ingredientes y amasar. (Esto es un poco horrible porque la carne está muy fría y se te quedan las manos heladas. Pero el que hamburguesas quiere…).
  • Dejar macerar durante una hora en la nevera.
  • Dar forma a las hamburguesas y hacerlas a la plancha con un poquito de aceite de oliva.
  • Hacer las pitas tal y como indique el envase. En mi caso solamente hacia falta humedecer y utilizar el tostador de pan para calentarlas.
  • Abrir las pitas hasta la mitad y rellenar con un par de hamburguesas, rodajas de tomate, lechuga y cebolleta. Añadir salsa al gusto.

Según comenta Juan, también se pueden hacer una especie de salchicha y comer como un pincho moruno, utilizar el horno en lugar de la plancha… ¡Al gusto del consumidor!

domingo, 9 de noviembre de 2008

Hierbas aromáticas frescas


Las hierbas aromáticas y las especias son el toque indispensable para muchos platos: el orégano en las pizzas, el curry y el comino de la cocina india, el pimentón del pulpo, la albahaca del pesto, la hierbabuena del mojito o el perejil de Arguiñano.

Tenerlos secos y en sus botecitos es muy cómodo, pero tener hierbas frescas, es ya todo un lujo.

No suelen ser difíciles de cuidar y en la cocina te sientes la mar de orgullosa cuando utilizas ingredientes cultivados por ti misma.

En el patio de casa, tengo plantada menta, albahaca, perejil, orégano y cebollino, no necesitas macetas demasiado grandes y las puedes poner en la ventana por lo que resulta bastante cómodo, sin embargo, el otro día apareció la tía Carmen con una solución super graciosa y adaptadas a nuestras necesidades.

Es una maceta que te permite cultivar 6 hierbas aromáticas, albahaca, perejil, orégano, mejorana, apio y cebollino en muy poco espacio, además de decorar la cocina. Por el momento me han germinado todas las plantas menos el apio, así que a partir de ahora espero poder utilizar mis hierbitas en un montón de recetas.

Morcilla con frutas de otoño

Con el otoño, además de la vuelta al cole, llegan un montón de cosas buenas: las naranjas nuevas, unas manzanas estupendas, las granadas, la calabaza y los membrillos.

El membrillo es una fruta que no llama demasiado la atención, por lo general no son fáciles de encontrar y además no puedes comértelos crudos, sin embargo, tienen un olor increíble que llena tu casa, hasta el punto de darte pena cocinarlos.

Mi prima Eva estuvo hace unas semanas en Salamanca, en el pueblo de los abuelis Pedro e Isabel, y trajo un montón de membrillos para todos.


La tía Adela además de pasármelos me imprimió la receta del dulce de membrillo, pero he de confesar que por alguna razón inexplicable no me cuajó como debía… Eso si, está muy rico para desayunar con las tostadas. El año que viene lo intentamos de nuevo.

Todavía me quedaban un par de ellos, y entonces me acordé de una receta que aparece en el libro “Cerdo e hijos” de Stéphane Reynaud, “Morcilla con frutas de otoño”.

Stéphane Reynaud ha escrito un libro precioso con fotografías de Marie-Pierre Morel y dibujos de José Reis matos. 366 páginas dedicadas al cerdo, con mil recetas y datos sobre este rico animalito, desde la matanza hasta el momento de servirlo en el plato, y todo ello ubicado en Saint-Agrève, un encantador pueblecito francés.


Por si os interesa, la editorial es Phaidon, y supongo que no será muy difícil de encontrar por Internet. Yo lo compré en el Musac de León, este verano nos acercamos allí Gari y yo con todos los amiguetes del Erasmus. Cuando era pequeña me gustaba tanto el cerdito y derivados que mi padre decía que conmigo los cerdos tendrían que andar con pistola, así que, cuando vi el libro, de una temática tan atrayente y con un diseño tan coqueto, no me pude resistir.

Pero vamos allá con la receta, exceptuando que hice menos cantidad de la que marca el libro y ciertos problemillas con el flameado (esto es alto cocina, darme tiempo…)lo hice tal cual marca el amigo Stéphane.

QUÉ

  • 3 peras duras peladas (yo además las partí por la mitad y les quité el corazón).
  • Un poco de canela molida.
  • 2 membrillo partidos en cuartos, pelados y descorazonados (pobres membrillos…).
  • Dos cucharadas de mantequilla.
  • 3 manzanas reinetas, también en cuatro trozos, sin piel ni corazón.
  • 1 morcilla.
  • 1 cucharada de azúcar.
  • Un puñado de castañas (el las utiliza de bote, ya cocidas).
  • 2 cucharadas de coñac.
  • Sal y pimienta .

CÓMO

  • Pon a cocer las castañas 1 hora o hasta que estén ya blandas (antes dales un corte con un cuchillo.
  • Pon a pochar el membrillo en una cazuela con la mantequilla derretida durante unos 15 minutos.
  • El fríe la morcilla, yo por aquello de las lorzas, he preferido hacerla durante 10 minutos al horno a unos 200 ºC (hay que pincharla antes de meterla al horno).
  • Espolvorea la pera con la canela y anádela junto con la manzana a la cazuela donde tenemos el membrillo.
  • Cuando la fruta se empieza a ablandar se añade el azúcar y las castañas y se dan unas vueltas.
  • Luego se echa el coñac y se flamea. Yo tomé todas las precauciones del mundo, pero la verdad, aquello no fue nada espectacular…
  • Se salpimenta y se sirve junto con la morcilla.

Se que es una receta un poco atrevida, que mezcla dulce y salado, pero al cerdo le va estupendo la fruta como la manzana, la piña…aunque no os lo creáis, a Gari le gustó, y él no es amigo de experimentos extraños.

Si no os gusta la morcilla, estas frutas también le irían estupendamente a un codillo, o a unas chuletas de cerdo. ¡Qué de posibilidades nos da este rico animalillo!

martes, 4 de noviembre de 2008

Pimiento choricero

Todos los años, a partir de septiembre llega el momento del pimiento choricero. Mi tía los compra frescos, los ensarta con una aguja enorme y cuerda fina y los cuelga de la ventana de mi ex–habitación. Luego, una vez secos, puede utilizarlos durante todo el año para diferentes recetas. (Exceptuando los que yo le mango, ¡claro!. Que haríamos los jóvenes de hoy en día si no pudiéramos comprar ciertos artículos en el supermercado madre…)

Para utilizarlos, hay que hidratarlos durante 24 horas, y si nos hemos olvidado de hacerlo de vísperas, darles un hervor. Se utiliza solamente la pulpa, sin piel y sin pepitas, para recetas como el marmitako, el sukalki o las patatas a la riojana. ¡Que rico! Habrá que cocinar y subir las recetas…

Este año hemos andado algo tarde para el ritual del pimiento choricero, para cuando nos hemos querido dar cuenta ya era demasiado tarde como para que se secasen, así que hemos tenido que comprarlos ya secos. Es mucho más bonito participar en todo el proceso, pero Paco, el frutero, me ha dicho que me vendía unos pimientos estupendos, y la verdad es que da gusto verlos. ¿No os parece?

A ver si para el año que viene andamos más listas y hablamos del pimiento choricero antes, para que a todos nos de tiempo a comprarlos y colgarlos de nuestras ventanas.

lunes, 27 de octubre de 2008

Efecto tarta bienvenida


Hacer un blog lleva su tiempo. En mi caso, primero tiene que aparecer una receta emocionante: debe ser original, tener una pinta estupenda, o valor tradicional… No se, tiene que llamarme la atención. Una vez que sé qué quiero hacer, organizo las compras, busco un hueco para cocinar, hago la foto... Mas tarde me pongo con la parte del texto y luego… ¡a subirlo todo! (Buff, solamente llevo dos recetas y ya tanto curreli…je je)

Luego llega la parte más gratificante, aunque lo dicho arriba también es muy bonito, cuando ves que la ilusión que has puesto, llega a alguna parte. Alguien ha leído tu blog, de hecho hasta es posible que haya dejado algún comentario. ¡Que ilusión!

En esta ocasión la amiga Uso y el amigo Termi además de leer e incluso hacer un comentario se han lanzado a hacer la “tarta de bienvenida”, ¡incluso me han mandado una foto!

Comentan que es peligrosa, se la comieron de una sentada, y que les gusta especialmente cuando ya se ha enfriado, incluso de nevera.

Apuntamos la sugerencia y animamos a todo el mundo a hacer recetas marikeli, a mandar foto, a dar opiniones y sugerencias, a compartir recetas propias….

¡Toda actividad cocinístico-creativa será bienvenida!

lunes, 20 de octubre de 2008

Camembert relleno


Este sábado hemos celebrado el cumple de Gari en casa (si, un mes y pico más tarde…¡Que difícil es compatibilizar agendas!). Aunque parezca mentira, conseguimos meternos 23 personas y el gato en mi pequeño hogar, con tanta gente no tenía en mente una cena demasiado elaborada, picoteo y tarta de chocolate (hice una tarta con galleta maría que me pasó mi tía Adela y que quedó la mar de jugosa, prometo poner la receta…).

A pesar de mi promesa de no cocinar nada excepto la tarta, echándole un ojo al suplemento de El Correo del domingo anterior, encontré una receta de Martín Berasategui que me llamó mucho la atención, ya se me habían puesto los dientes largos, así que no quedó más remedio que comprar los ingredientes para hacerla.

Seguí bastante fielmente la receta, aunque ya que estamos en el año de la innovación, el añadido de nueces es mío. Espero que al chef no le parezca mal…

El queso quedó muy rico, con el saborcito a ajo y perejil y el contraste de la nuez. Sin embargo, si no os gusta demasiado el sabor a ajo lo freiría ligeramente con aceite de oliva, porque al añadirse crudo el sabor es potente-potente. Para los no-amantes de la nata, no se nota nada, pero por otro lado tampoco creo que pase nada por no ponerla.

QUÉ
  • Un queso camembert, brie o similar
  • Un ajo
  • 2 cucharadas de nata
  • Perejil fresco picado
  • 8 nueces
  • Pimienta en grano (mejor moler al momento)
  • Sal
  • Aceite de oliva (optativo)

CÓMO

  • Cortar el queso por la mitad (que queden dos redondeles)
  • Cortar el ajo en filetes (freír en aceite de oliva si queréis un relleno más suave)
  • Partir las nueces y picarlas (en cachitos de 3mm más o menos)
  • Mezclar en un bol el ajo, la nata, el perejil, las nueces, un poco de pimienta molida y una pizca de sal.
  • Metemos en la cajita de madera originaria la mitad inferior del queso con la corteza hacia abajo, echamos la mezcla encima arañando con un tenedor para juntar bien y tapamos con la mitad superior del queso.
  • Lo metemos al horno (ya precalentado) 15 minutos a 210 ºC
  • Servir caliente con algún pan que os guste recién tostado

miércoles, 15 de octubre de 2008

Tarta de bienvenida

¡Bienvenidos al blog Marikeli!

Un blog de jugar a las cocinitas.

Llevo tiempo visitando blogs dedicados a la cocina, cotilleando recetas y viendo fotografías. Me hacía mucha ilusión hacer el mío propio, y aunque no sea una profesional del tema, quiero pensar que lo más importante es tener ganas de aprender cosas nuevas, de investigar, de meter la pata y hacer descubrimientos, y sobre todo de compartirlos con los demás.

Así que después de darle unas cuantas vueltas y marear con mis dudas a la gente de mi alrededor, el proyecto se ha hecho realidad, ya tengo mi blog. (Mis amigas ya tienen pruebas de mi presunto frikismo...)

Una vez hecho el diseño y la configuración del blog (¡gracias Ángel!), surgió la gran duda, ¿cual será la receta que tenga el honor de inaugurar el blog? Usoa resolvió rápidamente esta incognita, no cabía duda, tenía que ser la tarta de chocolate que siempre hago cuando vienen mis amigas a tomar café a casa.

Gracias a Miguel, tengo la receta de esta tarta. Es muy jugosa, gracias a las claras a punto de nieve y a la poca harina que lleva, tiene una textura tipo "mousse" muy agradable, además de un intenssso y profunnndo sabor a chocolate. Ummmm...

Así pues, allá va la receta, seguro que a las chocolateras les encantará. ¿verdad chicas?


Tarta de chocolate "de bienvenida"

QUÉ

  • 300 gr de chocolate negro
  • 125 gr de mantequilla y un poco más para el molde
  • 4 huevos
  • 1 cucharada de harina
  • 1 cucharada de azucar

CÓMO

  • Fundir el chocolate al baño maría.
  • Añadir las 4 yemas de huevo y revolver con rapidez para que no cuajen.
  • Añadir la mantequilla a "punto de pomada" (blandita pero sin llegar a estar derretida).
  • Añadir el azucar y mezclar bien.
  • Añadir la harina poco a poco mientras revolvemos para que no se formen grumos.
  • Montar las claras a punto de nieve (yo lo hago con las varillas de la batidora), y mezclarlo bien. Para que las claras no bajen hay que mezclar poco a poco, realizando movimientos envolventes desde abajo hacia arriba.
  • Verter sobre un molde redondo untado con mantequilla (el mío es de unos 22 cm de diámetro).
  • Meter al horno, ya caliente, durante unos 20 minutos a 180ºC.

Y a disfrutar!!